Como un castillo de arena

Como un castillo de arena. Su creador, aún sabedor de lo efímero de su obra, pone todo su empeño. Derrocha todo su amor en construirlo. Cuida sus formas, sus detalles. La marea, traicionera, traerá las olas que implacables, exterminarán de forma irremediable su existencia, borrando cualquier huella de lo que fue.

Del mismo modo, tu alegre sonrisa, pasará. Tus expresivos ojos, pasarán. Tu voluptuoso pelo, pasará. Tu graciosa forma de andar, pasará. Tu cálida voz, se apagará. Tus pensamientos, cesarán, hasta que al final, esa bella luz que proyectas, se agotará y lo hará para siempre. No habrá vuelta atrás. El tiempo siempre corre en nuestra contra. Sin más. Siempre lo hará.

Yo soy conocedor de este secreto. Sé que la vida, no es para toda la vida. La mayoría de los mortales lo desconocen. Me apena, pero no puedo hacer nada. No puedo hacer más de lo que hago. El que tenga oídos, que oiga. Pero nadie tiene oídos, nadie oirá...

Como iniciado, valoro el gran tesoro que eres. Un tesoro de tal valor, que si lo pusiéramos en una balanza contra todas las riquezas del mundo, la balanza permanecería pétrea, inmóvil, sin atreverse a elevarte siquiera un ápice.

Pero no te aflijas, no te inquietes. Como iniciado, también sé que cuando solo seas ceniza, morarás en otro lugar. Cuando tu alegre sonrisa pase, lucirá en otro lugar. Cuando dejes de pisar con tal gracia este mundo, pisarás otro, no has de dudar. Cuando tus expresivos ojos pasen, escudriñarán otros horizontes, cuando tu voluptuoso pelo pase, alegrará, quizás ceniciento, otro lugar. Cuando tu cálida voz se apague, trinará en otro lugar. Cuando tus pensamientos cesen, volarán libres en otro lugar. Cuando tu bella luz se agote, iluminará, sin duda, otra oscuridad.


Como preciosa flor de un día, renacerás, siendo tú, sin cambiar. Como un castillo de arena, así eres, así serás, cada día, tu creador, derrochando amor, te levantará…

Fotografía: Gema Benito. Texto: Pepe Desastre. Todos los derechos reservados.


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